Poemas

12

La tarde

El aire tibio de la tarde
entre sol y bruma algodonada
hilvana soledades y minutos
en espirales de dolor y lágrimas

El alma bostezando pesadumbres
de jóvenes vivencias,
al escuchar el grito del recuerdo,
sueña medio despierta.

Son sueños crueles, amargos,
rencorosos, son quimeras
resurgidas entre el odio y la nostalgia
de locas vidas viejas.

Grita el alma y repiten sus silencios,
desesperada queja,
al revolcar, hundida en su recuerdo
tanta mentira muerta,

tantos andares locos, tantas horas
de lujos y riquezas,
tantos desprecios de verdades simples,
que roen implacables la conciencia.

Pasa lenta la tarde
y aun más lentas las ideas,
y sigue el alma rumiando solitaria
el peso de su pena.

Nada volverá a ser como fue entonces
derroche de vidas y de fuerzas,
sólo podrá recuperar soñando
el mediocre gozar de la inconsciencia,

que ayuda a soportar tanto pasado
y permite soñar nuevas demencias.
aprisionar amaneceres nuevos,
y pretender de nuevo las estrellas.

El alma cantará nuevas canciones
y vivirá las nuevas primaveras
soñadas, arrulladas por el grito
del viento agudo de la noche negra.

Serán nuevos amores,
serán ternuras nuevas
serán sueños vestidos de ambiciones,
como entonces lo eran;

y seguiremos juntos el camino,
pesado el corazón, alma ligera,
enterrando nostalgias y rencores,
dejando a nuestros sueños riendas sueltas.

Alma, no llores más, deja que el viento
lleve hasta el mar el fardo de tus penas,
deja estallar fecundos pensamientos,
deja tu afán soñar a rienda suelta

deja el amor entrar en tu mirada,
deja que brille el sol tras noche negra
y que la lluvia lave tus pesares
y que la luz disipe tus tinieblas

Vuelve a pensar en ti, ríe de nuevo
Embriágate de amores, vive, sueña
Grita como lo hicieras tantas veces,
Tus ansias de vivir, la vida es bella !